¿Sabes cuál es el tuyo? Aquí te presentamos varias opciones…
Mesomorfos: Tipo forma de manzana
Tu dieta indicada será la mixta, ya que, esta consta de un equilibrio entre los hidratos de carbono, proteínas y grasas. Esto es 40% de carbohidratos, 30% de proteínas y 30% de grasas.
Para ti es recomendable aumentar el consumo de frutas y verduras, así como consumir pequeñas raciones de otros alimentos. Eso sí, debes comer hasta seis veces al día.
Ectomorfos: Tipo reloj de arena o tubo
Si perteneces a la categoría de ectomorfo, es de vital importancia que primero consultes a un médico para descartar cualquier condición médica y así poder cumplir esta dieta.
Si comes tres veces al día, entonces ahora intenta tener cinco comidas (3 comidas principales y dos meriendas). Tu dieta consistirá en el consumo de: 55% de carbohidratos, 25% de proteína y 20% degrasa.
Para ti es recomendable una ingesta elevada de carbohidratos, ya que por el sistema nervioso simpático de gran actividad convierten fácilmente la grasa en energía. Las mejores opciones de alimentos son: las nueces, frutas secas, semillas de girasol y vegetales con almidón.
Endomorfos: Tipo cuerpo de pera
Lo ideal sería que ajustes tu dieta a no más de 5 comidas diferentes al día y porciones pequeñas. Come lentamente y toma abundante agua, además de aumentar el consumo de proteínas magras y alimentos ricos en fibra para que estés satisfecha durante todo el idea.
Los endomorfos suelen tener un metabolismo lento, por ello necesitan comer 200 a 500 calorías menos de las recomendadas, así como seleccionar grasas “buenas” como aceite de oliva y aguacate.