En un estudio particular se testearon 10 tipos de estos zapatos basados en goma, tomando muestras de compañías conocidas y de reputación.
Los investigadores se sorprendieron al encontrar una cantidad de químicos peligrosos en niveles que representan un riesgo para la salud, incluyendo metales pesados e Hidrocarburos Aromáticos Policíclicos (HAP).
Al menos 7 de 10 sandalias fueron consideradas peligrosas. Sorprendentemente, el color negro era el más probable de contener los niveles más elevados de químicos tóxicos.
Los HAP pueden ser inhalados y por supuesto, los HAPs y los metales pesados son fácilmente absorbidos por la piel. Especialmente los HAPs, causan daño celular y mutaciones, significando un elevado riesgo de cáncer y otros problemas de salud.
Estos fueron los químicos más alarmantes que se pudieron identificar en estas sandalias, que también contienen un gran número de otros químicos y solventes que impactan sobre la salud, especialmente respecto a alergias de la piel.
Finalmente, puede ser que estas sandalias se vean bien y sean prácticas, pero su apariencia es engañosa, especialmente considerando la facilidad con que un químico puede ingresar al organismo a través de la piel…
De hecho la piel es considerada como un órgano que cumple sus funciones de respirar aportando oxígeno y vitaminas (E, D) al cuerpo y de desechar lo que no sirve (transpiración)
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