Que la quimioterapia aumentan las tasas de supervivencia a largo plazo es la mentira más grande de todas, puesto que la quimioterapia y la radiación mueven a las células cancerosas a otra parte del cuerpo, dejando a las células sanas solas.
El veneno es veneno y mata indiscriminadamente. La quimioterapia y la radiación son venenos que se hacen pasar por medicina. De hecho, este “tratamiento” para el cáncer es la causa principal de cánceres secundarios.
David Mihalovic, un médico naturista que se especializa en la investigación de vacunas, prevención del cáncer y en un enfoque holístico para el tratamiento del cáncer nos comentó:
“La quimioterapia en realidad nunca cura del todo un cáncer. Incluso lo que la medicina convencional considera un tratamiento “exitoso”, la quimioterapia solo sirve para controlar los síntomas, por lo general a costa de interferir con otras funciones fisiológicas en pacientes, causando efectos secundarios en el futuro.”
“La quimioterapia en realidad nunca cura del todo un cáncer. Incluso lo que la medicina convencional considera un tratamiento “exitoso”, la quimioterapia solo sirve para controlar los síntomas, por lo general a costa de interferir con otras funciones fisiológicas en pacientes, causando efectos secundarios en el futuro.”
Irónicamente, cuando la quimioterapia se supone que mata las células cancerosas, también es un estimulante de células sanas que producen una proteína que apoya el crecimiento del tumor y hace que las células sean más resistentes al tratamiento adicional del cáncer.
“Los científicos descubrieron que las células sanas dañadas por la quimioterapia secretan más de una proteína llamada WNT16B que aumenta la supervivencia de las células cancerosas.”
“El aumento de WNT16B fue completamente inesperado”, cuenta el coautor del estudio, Peter Nelson, del Centro Hutchinson de Investigación del Cáncer Fred en Seattle a la AFP.
“El aumento de WNT16B fue completamente inesperado”, cuenta el coautor del estudio, Peter Nelson, del Centro Hutchinson de Investigación del Cáncer Fred en Seattle a la AFP.
“En el tratamiento del cáncer, los tumores a menudo responden bien al principio, seguido de un rápido rebrote y la resistencia a la quimioterapia adicional.”
La Historia de Stan Rutner
Stan y Bárbara Rutner son una pareja que han estado juntos 59 años. Ambos han ganado gran experiencia contra la dura lucha contra el cáncer.
Hace aproximadamente 25 años, Stan fue diagnosticado de cáncer, mientras su mujer, había luchado dos veces y ganando la batalla al cáncer de mama. Stan recuerda: “Yo sólo pensaba que tenía una, gripe, cosa de tipo frío. Eso fue todo. . . No estaba pensando en el cáncer en absoluto”.
Después de seis meses de un tratamiento de quimioterapia bastante agresivo, Stan pensaba que le había ganado la batalla al cáncer, eso en 1989, para que después y de nuevo en el 2011, tuviera que volver a luchar contra esta terrible enfermedad.
Esta vez, la quimioterapia y la radiación hicieron estragos en el cuerpo de Stan. Poco después del tratamiento que se inició en marzo-abril de 2012, Stan estaba plagado de una fatiga debilitante, consumiéndose, sufriendo una pérdida peso rápidamente y con un sinfín de náuseas crónicas.
Los médicos le dieron pocas semanas de vida y le tuvieron que ingresar en cuidados paliativos.
A Stan ya no le quedaba más que probar la marihuana medicinal. Gracias a la marihuana su apetito mejoró y cesaron las terribles nauseas.
A Stan ya no le quedaba más que probar la marihuana medicinal. Gracias a la marihuana su apetito mejoró y cesaron las terribles nauseas.
Después de un par de semanas de haber iniciado el tratamiento con el cannabis, la condición de Stan mejoro en todos los sentidos.
Él comenzó a ganar peso, pudo dormir mejor y fue recuperando su fuerza. Finalmente se deshizo de su andador, se deshizo de la bombona de oxígeno y comenzó a ejercitar su cuerpo.
Después de varios meses tomando esas píldoras de cannabis, Stan decidió realizarse una resonancia magnética para comprobar su progreso.
Resultado: No hay evidencia de la enfermedad. El cáncer de pulmón había desaparecido.
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