Es conveniente si se tiene la posibilidad de plantar un árbol, no dudar en hacerlo, sus partes son muy útiles para la salud. Se le cono ce como graviola en Brasil, Guanábana en Hispanoamérica y chirimoya en Chile.
Su fruta es grande, su pulpa dulce y blanca, se ocupa para preparar dulces, bebidas, sorbetes etc. Posee poderosos efectos anti cancerígenos y actúa sobre los tumores por sus muchas propiedades. Esta planta está probada para todo tipo de cánceres.
Además se le considera un agente antimicrobial, contra las infecciones por hongos y bacterianas, actúa contra los parásitos internos y gusanos, regula la presión arterial alta, es antidepresiva, combate los desordenes nerviosos y la tensión.
Este árbol milagroso podría revolucionar lo que se piensa sobre el tratamiento del cáncer y las posibilidades de supervivencia que nos ofrece.
Los beneficios de este maravilloso árbol son:
Trabaja como terapia natural sin ocasionar pérdida del cabello, ni peso y no causa náuseas extremas como lo hacen las quimioterapias tradicionales.
La persona se siente más saludable y fuerte a lo largo del tratamiento.
Mejora las perspectivas de vida con la energía renovada.
Protege el sistema inmunológico y evita las mortales infecciones.
Existen pruebas realizadas que revelaron lo siguiente:
Los compuestos que posee este árbol, retardan el crecimiento de las células de cáncer que el producto llamado Adriamycin, la droga quimioterapéutica más utilizada en el mundo.
Destruye las células malignas en 12 tipos de cáncer de pecho, de próstata, del pulmón, del colon del páncreas etc.
Pero lo más asombroso es que esta terapia con el extracto de la fruta, destruye solamente las células malas del cáncer sin afectar las sanas.
Entonces ¿si el extracto de esta planta es tan beneficiosa por sus propiedades anti cancerígenas, por qué los oncólogos no recomiendan a sus pacientes que lo usen?
Pues es una respuesta muy sencilla:
Nuestra salud y nuestras vidas, desgraciadamente están bajo el control del poder económico.
Todas las partes de la chirimoya son útiles, raíces, semillas, hojas y pulpa, han sido utilizadas por siglos por los indígenas y curanderos nativos de América del Sur, en los tratamientos de la artritis, asma y enfermedades del corazón.
Entonces la Chirimoya o Graviola es una gran planta que trabaja muy bien.
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