Nuestro rostro es lo primero que ven las personas cuando nos acercamos a ellos. Gracias a él podemos tener mejores relaciones con nuestro entorno.
Porque cuando las personas nos ven notan que somos personas que se cuidan y esto genera confianza en los demás.
Para mantener un rostro perfecto hay que realizar cuidados continuos, así se mantendrá en excelentes condiciones siempre. Desafortunadamente, la piel del rostro se ve afectada por múltiples problemas con el paso de los años.
Las marcas de la edad (arrugas y líneas de expresión), manchas por el sol, marcas de acné, cicatrices, todo esto hace que nuestro rostro pierda belleza y vitalidad. Por esto, muchas personas recurren a tratamientos estéticos costosos y a veces peligrosos para nuestra salud, sin saber que hay formas naturales igual de efectivas o mejores.
Esta sencilla receta que te enseñaremos a continuación es una obra maestra de la naturaleza, cada uno de los elementos que la componen están cargados de beneficios para tu cuerpo, especialmente para el rostro.
Con esta mascarilla podrás eliminar todo lo que hace que tu rostro se vea feo y descuidado, te permitirá limpiar, rejuvenecer y refrescar el rostro sin necesidad de gastar grandes sumas de dinero.
DOS INGREDIENTES MILAGROSOS PARA TU ROSTRO
La base principal de esta mascarilla es el vinagre de manzana y el bicarbonato de sodio, ambos elementos seguramente los tienes en casa porque su uso es muy común en la cocina. Pero seguramente no sabías que son magníficos para tratar la piel.
INGREDIENTES:
- bicarbonato de sodio
- vinagre de manzana
- 1/2 limón
- miel
PREPARACIÓN:
En medio vaso de agua debes diluir 1 cucharadita de vinagre de manzana. En un envase aparte colocar un poco de bicarbonato de sodio y luego agregar lentamente la mezcla de vinagre y agua. Exprimir el medio limón sobre la preparación y por último agregar la miel. Revolver durante unos minutos, hasta obtener una mezcla consistente y homogénea.
MODO DE USO:
Antes de aplicar esta mascarilla debes lavar muy bien el rostro, esto abrirá tus poros y quitará todo los restos de maquillajes que puedas tener, luego seca muy bien con un paño limpio y suave.
Una vez que hayas realizado esto, puedes aplicar la mascarilla cuidadosamente, debes dejarla actuar de 5 a 10 minutos aproximadamente. Para finalizar, retira la mascarilla con abundante agua tibia, y puedes terminar con un poco de agua fría así cerrarás tus poros.
Haciendo esto verás que tu piel quedará reluciente y se verá mucho más sana que antes.
