Alguien debe ser el alma de la fiesta y aunque puedes exagerar, ¡a ti te sale genial!
Siempre está esa amiga en el grupo que se subirá en las mesas, gritará cosas ridículas en lugares públicos y que se pondrá a bailar en el pasillo de alimentos congelados del supermercado. Ella es la amiga loca, y si estás leyendo esto pensando que tal amiga existe en tu grupo o puede que hasta tu misma lo seas, te sentirás identificada.
Si no has llegado a un acuerdo con el hecho de que “ser loca” es parte de tu identidad, aquí te mostramos 14 signos reveladores que podrían servirte de ayuda:
1. Hablas muy fuerte
Te hacen callar mucho. Las personas te hacen señales con sus manos para que bajes el volumen y los extraños o bien se ríen o hacen muecas con las cosas que haces y dices. Tu presencia se nota cuando llegas a un lugar. Puede que no seas consciente de tu falta de control de volumen. Todo lo que sabes es que no estás en una biblioteca, así que ¿cuál es el problema?
2. Casi nunca eres la que está a cargo cuando salen a beber
Tus amigos te conocen demasiado bien. Por lo general, es de esperar que estés algo borracha como para ser responsable de otras personas, y mucho menos de ti misma. Y, todo el mundo está bien con eso porque simplemente así es como eres.
3. Eres el alma de la fiesta
Sin ti, hay algo que falta. Sin pensarlo dos veces, haces lo que la mayoría de las personas encuentran demasiado embarazoso de hacer. Eres la primera en hacer fila para entrar al baño de hombres en el bar cuando hay 45 niñas haciendo fila para el baño de mujeres. Harás comentarios vulgares que nadie pensaría en decir, y a tus amigos les encanta el toque que le das a una noche que puede haber sido totalmente tranquila.
4. Algunas personas no te soportan
Tú no eres una persona para los débiles de corazón. Algunas personas son demasiado conservadoras o de modales suaves como para soportar tus travesuras. Puede que aquellos que claramente no toman con tanta alegría la vida como lo haces tú, te miren desinteresadamente o como si estuvieran juzgándote.
5. No tienes filtro
Te atreves a decir en voz alta lo que todo el mundo estaba pensando pero no se atrevía. Esto es a la vez una bendición y una maldición. Pero tú prefieres verlo como algo positivo.
6. “¿Estás borracha?”
“¿Estás drogada?” “No, hombre, ¡estoy llena de vida y borracha de amor!”. Tu energía y la falta de vergüenza pueden ser sorprendentes para aquellos que no conocen que puedes ser salvaje, vergonzosa y torpe mientras que estás completa y totalmente sobria.
7. Siempre tienes una historia que contar
Cuando te encuentras con un amigo que no has visto en mucho tiempo, o incluso en pocos días, tienes mucho de qué hablar. No es difícil buscar temas de conversación porque tienes un montón de material. Eres capaz de hacer un monólogo con todo el contenido loco que has recogido a lo largo de tu vida.
8. Los amigos de tus amigos han escuchado de ti
No es inusual que cuando te reúnes con el amigo de tu amigo, que él o ella te salude con una gran sonrisa combinada con un: “he oído hablar mucho de ti”. Tus amigos no se pueden contener en compartir cariñosamente con los demás los episodios infames de tu vida.
Visto en Elite Daily & Imágenes de We Heart It.
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