Es una enfermedad crónica que también puede afectar al esófago, la región anal o los testículos. Si bien los várices es una enfermedad crónica-hereditaria, podemos prevenirla y controlarla a través de tratamientos naturales en base a suplementos alimenticios, llevando una vida en lo posible saludable.
Para esto es importante que adoptemos un estilo de vida que nos permita mejorar la circulación de la sangre en las piernas, ya que se origina por una mala circulación sanguínea, por lo que la alimentación debe enfocarse en elegir nutrientes que ayuden a la producción de las proteínas que conforman las venas y arterias.
Síntomas principales:
- Dolor en las piernas
- Cansancio
- Aparición de sangre en las piernas
Alimentos que nos ayudan para las várices:
Vitamina C: las venas y arterias poseen 2 tipos de proteínas: colágeno y queratina. La vitamina C ayuda a la producción de éstas, manteniendo el fortalecimiento de las venas y arterias para que no se inflamen ni rompan tan fácilmente. El limón, naranja, pomelo, frutilla, kiwi, tomates, pimentones.
Vitamina E: mejora la circulación y la oxigenación hacia las arterias y venas. Las almendras, el germen de trigo y la palta son estupendas fuentes de vitamina E.
Ácidos grasos Omega 3: ayudan a reducir los niveles de inflamación del cuerpo. Estos son salmón, sardinas, jurel, atún, nueces, chia, aceite de oliva.
Ajo: ayuda a rejuvenecer las arterias y venas hasta por 15 años regenerando las que se encontraban dañadas, sanándolas evitando así tener placa arterial formada.
Piña: posee una enzima que se encarga de regenerar el tejido dañado a lo largo del cuerpo.
CoQ10: este nutriente lo produce naturalmente el cuerpo, pero pasados los 25-30 años de edad, y con el uso de ciertos remedios, se va reduciendo, por lo que es importantísimo tomarlo.
Té y extracto de la hierba Castaño de Indias (Horse Chestnut): un té de castaño de indias, o aplicarlo directo sobre las várices; compresas de repollo y loción de ciprés, ayudan a reducir el dolor e inflamación permitiendo así su rápida recuperación.
Considerar:
- Si son várices primarias, están las válvulas congénitamente defectuosas. Las válvulas son las responsables de hacer circular la sangre hacia el corazón, por lo que si no funcionan como deben la sangre se acumula en la vena provocando su hinchazón.
- La tromboflebitis provoca el mismo efecto. En este caso, son trombos, es decir, coágulos, los que dificultan la circulación. A veces sucede tras prolongados períodos de reposo en cama.