En esta lista aparecen algunas de las cosas sencillas que cada uno de nosotros puede hacer para hacer del mundo un lugar más agradable. Todas estasideas son simples y universalmente reconocidas.
Lamentablemente, muchas de ellas parecen haber sido olvidadas en el mundo de hoy. A veces, la presión o el estrés en nuestra vida pueden llevarnos a mostrar menor consideración con otras personas.
Cada una de estas ideas simples pueden hacer una contribución significativa a la calidad de nuestra vida y las vidas de los demás.
Listado.
1) Decir por favor y gracias: simple, pero muy a menudo pasado por alto. Cuando quieras algo, di por favor. Cuando alguien haga algo bueno por ti, gracias. Esto puede sonar como una cosa menor, pero la gente aprecia este tipo de detalles.
2) Ser cortés: esto es sólo una cuestión de ver las cosas desde la perspectiva de otra persona. Si notas algo que puedes hacer para que la situación de otra persona sea más fácil, entonces hazlo.
¿Tan difícil es mantener la puerta abierta para que alguien entre a algún lugar o parar el coche para dejar que alguien cruce la calle?
3) Sigue la regla de oro: en pocas palabras, tratar a los demás como te gustaría ser tratado/a. Lo idea es muy sencilla. Piensa por un momento lo diferente que sería el mundo si todos actuásemos según esta regla. No existiría ningún crimen y no habría guerras.
Por supuesto, no podemos controlar las acciones de otras personas, pero podemos controlar la forma en que nos comportamos. Si tratas a los demás con este nivel de respeto, la vida te lo pagará con creces.
4) Trabajar con los demás: la cooperación y el trabajo en equipo puede conllevar múltiples beneficios en todos los ámbitos de la vida.
No me refiero únicamente al ámbito del trabajo sino también a las situaciones cotidianas de la vida.Si estás en una tienda llena de gente o con tu coche circulando en medio de un tráfico pesado, la cooperación hará que la experiencia sea más manejable.
5) Sonríe con frecuencia: nunca subestimes el poder de una sonrisa. El efecto es doble. Tiende a elevar tu estado de ánimo y eleva los espíritus de las personas a las que sonríes. Si regalas sonrisas recibirás sonrisas.
6) Decir “lo siento”: esta es una de las primeras lecciones que aprendemos en la vida, pero olvidamos algunas de estas lecciones a medida que envejecemos.
El principio es muy simple. Si haces mal a alguien, o si cometes un error, o si haces daño a otra persona (con o sin intención), pide disculpas por ello. No pierdas tu tiempo tratando de asignar culpas. Sé el/la primero/a en decir “lo siento” y de inmediato te sentirás mejor.
7) Ser honesto/a: di la verdad, incluso cuando no parezca muy favorable a tus intereses. Una mentira no soluciona nada. El problema o la cuestión sigue ahí, bajo el manto de la mentira, y permanecerá allí hasta que se descubra la verdad. La honestidad es un reflejo de uno/a mismo/a. Al ser honesto/a, otras personas te encontrarán más simpático/a.
8) Escuchar: una ventaja principal de escuchar es la cantidad de cosas que se pueden aprender. Si pasamos la mayor parte de nuestro tiempo a hablando, ¿cómo podremos aprender algo?
Una de las mejores maneras de ser visto como una persona agradable es ser un buen oyente. No siempre es fácil, pero escuchando les dices a los demás que estás genuinamente interesado/a en ellos, ¿a quién no le gusta eso?
9) Regalar elogios: ¿alguna vez has recibido un elogio inesperado? ¿Cómo te hace sentir eso? A todo el mundo le gusta recibir un elogio. En un mundo que tiende a ser demasiado crítico, un elogio sincero puede ser muy alentador.
Un apunte: debe ser un cumplido sincero. Si nuestros elogios no son sinceros podrían ser vistos como falsos, así que cuando regales un cumplido asegúrate de que estás diciendo la verdad.
10) Ríe: a todo el mundo le gusta reír. Reír libera endorfinas que te hacen sentir feliz y relajado/a. La risa es terapéutica y contagiosa. Cuando te ríes, también estás fomentando la risa de los demás.
