¿Cuántos fracasos has cosechado en tu vida? ¿Muchos? ¿Pocos? ¿Ninguno? Esta última respuesta no me la creo. Te digo una cosa: fracasar forma parte de la vida. Quien más quien menos ha tenido algún fracaso en la vida y te digo una cosa: no pasa absolutamente nada. De los fracasos se aprende y sin los fracasos no se obtendrían muchos éxitos.
Sin embargo, hay muchas personas que ante determinados fracasos, graves fracasos, se derrumban y quedan muertas en vida. Esta actitud sí que es un verdadero Fracaso (con mayúsculas). No debes dejar que nada ni nadie ahogue el potencial que todos tenemos en nuestro interior.
Es hora de recargarnos las pilas y afrontar la vida con la cara bien alta. Si fracasas, ¡no importa! Levántate y vuelve a intentarlo. Sigue tu camino con más ansias y esperanzas para vivir. Que el fracaso sea un acicate para arremeter con más entusiasmo en la vida.
Con determinados fracasos necesitaras ayuda ajena. Hay personas que no tienen los recursos mentales para afrontar un divorcio, un despido en el trabajo, la ruptura de una amistad… Son estas personas las que deben buscar apoyo en sus seres más queridos. La carga compartida es menos pesada.
No tengas miedo al fracaso
Te dejo 3 ideas que te pueden servir para afrontar un fracaso de la mejor manera posible:
1) En primer lugar debes ser una persona positiva, optimista. Esto es fundamental. Si eres una persona que tiende a ver las cosas de color negro, refunfuñas por todo, todo el mundo te cae mal, te aíslas socialmente…te será más difícil afrontar un palo duro que te dé la vida.
Tienes que empezar por limar el carácter. Si bien no existen los milagros, es posible cambiar poco a poco el carácter. Te recomiendo este artículo: 6 emociones que debes cultivar.
2) Entender que cuando una puerta se cierra se abre otra. Miles de oportunidades pueden surgir a partir de un fracaso. Si te han echado del trabajo puede que acabes trabajando en algo mejor o encuentres nuevos compañeros más agradables. Si te has divorciado no te centres en el pasado. Mira hacia el futuro: una nueva vida con miles de sorpresas se abre ante ti.
3) El paradigma del fracaso lo representa ni más ni menos que Thomas Edison: para él no existía la palabra fracaso. Antes de inventar la bombilla cosechó 10.000 fracasos. Declaró lo siguiente: “No he fracaso 10.000 veces. Simplemente he descubierto 10.000 maneras de cómo no hacer una bombilla”. Sin duda, Edison fue el hombre que tuvo la fortuna de fracasar 10.000 veces para inventar la bombilla.